Hacer todo en el Nombre de Jesús  Colosenses 3:17 – 4:6

17 Y todo lo que hacéis, sea de palabra o de hecho, hacedlo todo en el nombre del Señor Jesús, dando gracias a Dios Padre por medio de él.

Dios nos manda hacer todo en el nombre de Jesús, como si fuese Cristo mismo haciéndolo. La mayoría de las Biblias tienen una división y nuevo título después de ese verso, interrumpiendo el fluir del pasaje. Porque comenzando con verso 18 Pablo nos enseña cómo hacerlo en cuatro áreas importantes de la vida.

¡Advertencia!

Si no has destruido a los enemigos adentro, y no te has puesto la nueva naturaleza de Jesucristo, ¡esto será imposible! Puede ser que ya tú lo has intentado y te has dado por vencido. Necesitas la fundación de la primera parte del capítulo 3. Vuelve a leer y estudiar lo que escribí sobre la crisis y cómo sobrevivir esas pruebas.

La familia

18Esposas, sométanse a sus esposos, como conviene en el Señor. (DHH: pues éste es su deber como creyentes en el Señor.)

19 Esposos, amen a sus esposas y no sean duros con ellas. (DHH: no las traten con aspereza)

20 Hijos, obedezcan a sus padres en todo, porque esto agrada al Señor.

21 Padres, no exasperen (DHH: hagan enojar) a sus hijos, no sea que se desanimen (RVR: se desalienten).

Hay una conexión íntima entre tu vida familiar y tu vida espiritual. Si no hay orden bíblica en tu hogar será difícil andar en victoria.

La sumisión a autoridades es una enseñanza importante en la Biblia. No es popular, pero no es opcional para la esposa cristiana. Mi hermano, si de verdad amas a tu esposa como Cristo ama a la iglesia, y si ustedes son discípulos sinceros de Jesús, la sumisión no debe ser difícil. Si lo es, no la golpees con este versículo, exigiendo que ella se someta.  Pídele al Señor que te muestre si hay algo en ti que tú tienes que cambiar. Pregúntale a ella si hay algo que tú haces que le hace difícil someterse a ti. Entrégala al Señor, confiando que Él cambiará su corazón. Acuérdate que ella es un vaso más frágil (aunque a veces no parece así). Pablo sabe que es fácil para un hombre ser duro o áspero con su mujer. Atesórala, sé tierno con ella, y examina tu corazón a ver si hay amargura o resentimiento hacia ella.

Padre, ten mucho cuidado de como tratas a tus hijos. Hay padres rígidos, con una mano dura y expectativas  muy altas, y sus hijos se desaniman. Es natural jugar con tus hijos, pero es fácil para muchos hombres exasperarlos.  Si tus hijos están desanimados, examínate, a ver si estás haciéndolos enojarse. No es fácil ser padre, y Dios lo sabe. Él quiere animarte, fortalecerte, y guiarte por su Espíritu. ¡Él es el único padre perfecto! ¡No exijas demasiado de ti mismo!

Trabajo

22Esclavos, obedezcan en todo a sus amos terrenales, no sólo cuando ellos los estén mirando, como si ustedes quisieran ganarse el favor humano, sino con integridad de corazón y por respeto al Señor (RVR: con corazón sincero, temiendo a Dios). 23 Hagan lo que hagan, trabajen de buena gana, como para el Señor y no como para nadie en este mundo, 24 conscientes de que el Señor los recompensará con la herencia. Ustedes sirven a Cristo el Señor. 25 El que hace el mal pagará por su propia maldad, y en esto no hay favoritismos (RVR: no hay acepción de personas). 4:1Amos, proporcionen a sus esclavos lo que es justo y equitativo, conscientes de que ustedes también tienen un Amo en el cielo.

Este es un pasaje difícil. Pablo habla acerca de esclavos, pero no condena la esclavitud, aunque la Biblia nunca la aprueba tampoco.  Poner en práctica principios cristianos transforma la relación de esclavo y amo, y eventualmente elimina la esclavitud.

El mandato bíblico de sumisión a autoridad incluye el jefe en tu trabajo; obedece lo que te dice. Pero va mucho más allá de la obediencia.  El cristiano tiene otra ética de trabajo, y muchas veces prospera en su trabajo. Hacemos todo con excelencia, lo mejor posible, con todo el corazón, porque no es para ganar el favor del hombre, sino para Jesús. Él siempre está observándote, aun cuando tu amo está ausente.  Esto beneficia tú y tu trabajo, da un buen testimonio, y edifica tu carácter. Si el jefe no está mirando, es muy común malgastar mucho tiempo en el internet o el celular. Es una falta de respeto y reverencia para el Señor no trabajar con todo tu corazón.

Tú puedes estar enojado y no hacer un buen trabajo porque crees que no recibes una compensa adecuada, o no recibiste esa promoción. A veces incluso pueden exigir más de ti para el mismo pago – o aún menos.  Pero Dios sabe todo, y te recompensará. Él tiene un bono esperándote – una herencia hermosa. ¿Crees que puedes hurtar de tu trabajo sin consecuencias? Lo siento, pero lo pagarás a Dios. ¿Crees que eres especial porque eres cristiano? Lo siento, pero no hay acepción de personas con Dios.

Si tú eres el supervisor en tu trabajo, no muestres favoritismo, sino trata a todos justo e igual. Ten cuidado del orgullo, porque tienes que rendir cuentas a tu Amo celestial.

¿Cómo te va en el trabajo? Es fácil caer en los mismos hábitos del mundo, y es difícil ir contra la corriente. A veces resulta que no eres muy popular, porque tu buen trabajo revela las fallas de otros, pero eres un embajador del Señor del universo. Sé un ejemplo en tu trabajo y un buen testigo para Jesús.

Oración

2 Dedíquense a la oración: perseveren en ella con agradecimiento 3 y, al mismo tiempo, intercedan por nosotros a fin de que Dios nos abra las puertas para proclamar la palabra, el misterio de Cristo por el cual estoy preso. 4 Oren para que yo lo anuncie con claridad, como debo hacerlo.

¿Dirías honestamente que eres dedicado a la oración? Pablo oraba sin cesar – y nos manda hacer lo mismo. Es posible engañarte a ti mismo por un rato, creyendo que puedes ser un buen cristiano sin mucha oración. Hay un himno viejo, Qué Amigo nos es Cristo, que dice que sufrimos mucho porque no llevamos todo a Dios en oración. Y es la verdad.

  • Persevera en oración. Estás en una batalla espiritual; ¡la oración es una de las armas principales!
  • Llena tu oración con agradecimiento. ¿Te gusta cuando tus hijos solamente te acercan para quejarse o pedirte algo? La Biblia nos manda dar gracias en todo.
  • Intercede por los siervos del Señor  y todo el Cuerpo de Jesús. ¡No es todo acerca de ti! Ora por tu pastor y por los misioneros, y no simplemente “bendice a los misioneros,” sino ora con conocimiento, con peticiones específicas. Pablo era un varón de mucha fe, pero sabía la importancia del apoyo de la iglesia en oración. ¡Qué interesante que quiere oración para que predicara con claridad! Parece que si alguien pudiera hacerlo, ¡sería Pablo!
  • Ora que Dios abriera puertas para el evangelio. Pablo dice que se debe predicar con claridad. ¿Lo haces? ¿Te das cuenta de que Dios tiene que abrir las puertas para una evangelización eficaz?  Si nadie está aceptando a Jesús, ¿está la iglesia orando por esas puertas abiertas? ¡Porque Dios las abrirá! Y sí, tú tienes una parte importante en la evangelización.

Sé un buen testigo para Cristo

5 Compórtense sabiamente con los que no creen en Cristo, aprovechando al máximo cada momento oportuno (RVR: redimiendo el tiempo). 6 Que su conversación sea siempre amena y de buen gusto (RVR: sazonada con sal). Así sabrán (DHH: deben saber) cómo responder a cada uno.

Esas puertas abiertas no son solamente para evangelistas, sino para ti también. Cuando Dios te abre la puerta, ¡comparte la Palabra! Prepárate para que sepas que decir y cómo responder a las objeciones de la gente.  Tu iglesia, ¿da clases de cómo evangelizar y responder a la cultura moderna?

  • Compórtate sabiamente con los incrédulos. Tu testimonio comienza con tu diario andar. No te alejes de la gente, ni seas un fariseo, con una actitud superior.
  • ¿Siempre te aprovechas de cada oportunidad para testificar acerca de Cristo? ¿Redimes el tiempo? ¿O lo malgastas?
  • Guarda tu lengua. Tu conversación, no solamente palabras, sino todo tu comportamiento, siempre debe ser amena y de buen gusto. Cristo era (y es) muy atractivo, y sus discípulos deben atraer a la gente también. Necesitas sabiduría para saber cómo responder a cada individuo. Si estás caminando bien, será más fácil.

Testificar para Cristo mantiene el fluir del Espíritu en tu vida. ¿Cuándo fue la última vez que testificaste a alguien? ¿Cómo está tu conversación?

Es bueno destruir a tus enemigos, vestirte con la nueva naturaleza, y disfrutar la vida buena, pero también hay que trabajar en estas cuatro áreas para llegar a la madurez cristiana. ¡Qué Dios te de la gracia para caminar en esa victoria!