Una Iglesia Sana; Efesios 4:4-16

Ya hemos visto la preeminencia de la iglesia en el plan de Dios. Es el cuerpo de Jesucristo, un concepto que Pablo desarrolla más en 1 Corintios 12. En la unidad de ese cuerpo hay mucha diversidad. Todos somos diferentes.  Tenemos dones distintos, vocaciones distintas y personalidades distintas. Eso es bueno; la unidad no significa uniformidad. Pero en la diversidad tenemos que hacer todo lo posible para guardar la unidad que ya tenemos. Así que es importante entender claramente lo que compartimos en común.

Nuestra unidad

Siete veces en estos versículos Pablo usa la palabra “uno:”

Un cuerpo, y un Espíritu, como fuisteis también llamados en una misma esperanza de vuestra vocación; un Señor, una fe, un bautismo, un Dios y Padre de todos, el cual es sobre todos, y por todos, y en todos. (RVR)

  1. Cristo tiene un solo cuerpo. Cada verdadero creyente es parte de esta iglesia universal. Ni el concilio ni la denominación importan.  Cuando Cristo venga, habrá un solo cuerpo esperándole, la novia del Cordero.
  2. Hay un solo Espíritu Santo que mora en cada creyente.
  3. Hay un solo Salvador y Señor, Jesucristo, que es la cabeza de cada expresión local de su cuerpo (cada iglesia).
  4. Hay un Dios y Padre. Él es Dios de todos, sobre todos, por medio de todos y en todos. Nuestro Padre tiene una sola familia. Hay algunos que dicen que la trinidad no es bíblica, pero aquí se la ve claramente.
  5. Hay un solo bautismo, aunque todos no lo administren lo mismo.
  6. Todos tenemos la misma esperanza de nuestro llamado a la salvación: la vida eterna en el Reino de Dios.
  7. Hay una sola fe: en Dios, su Palabra, y lo que Cristo hizo en la cruz.

¿Tienes este concepto de unidad con hermanos de otras iglesias? Hay que buscar la paz y la reconciliación, y trabajar juntos con ellos. No estamos en competencia, tal como tu mano no está en competencia con tu pie. A veces alguien dice que quiere trabajar para el Señor, pero no quiere trabajar con otros. La obra del Señor se basa en el amor y la importancia de cada miembro de su cuerpo. Es casi imposible ser un verdadero cristiano solo y aislado. No es fácil, pero hay que soportar con paciencia a otros y sus fallas.

Diversidad en la unidad

A pesar de esta unidad, hay un “pero” muy importante: Dios es uno, pero nosotros somos muchos, con vocaciones muy distintas:

Pero a cada uno de nosotros fue dada la gracia conforme a la medida del don de Cristo. (RVR)

Las diferencias entre nosotros en la iglesia son buenas. Hay algunos que prefieren un culto muy tranquilo; otros quieren gritar y danzar. Ambos pueden estar en la voluntad de Dios; mucha variedad es posible en el cuerpo de Jesús.

La misma palabra griega (charism) se traduce “gracia” o “don.” “La gracia” aquí significa dones espirituales. Cada creyente tiene a lo menos un don, dado por la voluntad de Dios. No puedes ganarlo, y no lo mereces porque seas un buen cristiano o seas tan maduro. Es un don, dado conforme a la medida del don de Cristo.

Por lo cual dice:
Subiendo a lo alto, llevó cautiva la cautividad,
Y dio dones a los hombres. 

Y eso de que subió, ¿qué es, sino que también había descendido primero a las partes más bajas de la tierra? 10 El que descendió, es el mismo que también subió por encima de todos los cielos para llenarlo todo. (RVR)

El verso 8 cita el Salmo 68. Jesús se humilló a sí mismo y descendió aquí a esta tierra. Entonces su Padre lo enalteció al lugar más alto, a su diestra, gobernando el universo y llenando todo (Filipenses 2). Cuando Cristo subió al cielo, repartió dones a nosotros, comenzando en Pentecostés y continuando hasta el día de hoy. Tenemos que seguir el ejemplo de nuestro Señor: Dios quiere exaltarte, pero primeramente tienes que humillarte. Para subir primero tienes que bajar.

Cinco oficinas en la iglesia

11 Y él mismo constituyó a unos, apóstoles; a otros, profetas; a otros, evangelistas; a otros, pastores y maestros. (RVR)

Entre estos dones, Cristo constituyó oficinas con autoridad para establecer su iglesia. Estos son los líderes. Hay orden, con los apóstoles primeros:

Apóstol significa “enviado” (por el Señor, y por otra iglesia) para plantar y supervisar iglesias.  El apóstol mantiene una sana doctrina y la pureza de la iglesia, y tiene autoridad espiritual.

Profetas visitan varias iglesias, a veces con un mensaje de corrección. También predigan algo del futuro. Esta oficina de profeta es distinta del don de profecía descrito en 1 Corintios 14. El don está disponible a todos, y es para exhortación y consuelo.

Evangelistas. Todos deben evangelizar, pero el evangelista tiene una unción especial. No predica un mensaje diferente, pero Dios lo ha llamado y lo usa para llevar las buenas nuevas a muchos.

Pastores cuidan de las ovejas en la iglesia, y las alimentan. Un pastor necesita un corazón de amor por las ovejas. Algunos que están pastoreando iglesias realmente son evangelistas o maestros. Otros están persiguiendo su propia agenda; son asalariados y no se preocupan por sus rebaños (Juan 10:12).

Maestros tienen la capacidad de hacer clara la Palabra de Dios. La iglesia necesita enseñanza sana de la Biblia.

El propósito de estas oficinas

12 A fin de perfeccionar a los santos para la obra del ministerio, para la edificación del cuerpo de Cristo. (RVR)

El ministerio de cada oficina es esencial para establecer una iglesia fuerte. Ellos no hacen todo el ministerio, sino que capacitan y perfeccionan a los santos para que ellos, en su vocación, hagan el ministerio. Hay algunos pastores que, en la ignorancia o la inseguridad, no quieren que otros ministren. Ellos piensan que tienen que hacerlo todo. Una iglesia dominada por un pastor que no permite que los dones funcionen solo crecerá a la medida de las habilidades de ese pastor, y casi siempre sufre cuando ese pastor se va.

 La meta

13 Hasta que todos lleguemos a la unidad de la fe y del conocimiento del Hijo de Dios, a un varón perfecto, a la medida de la estatura de la plenitud de Cristo. (RVR)

¿Cuál es el fin de todo ministerio en la iglesia?

  • Llegar a la unidad de la fe.
  • Obtener la unidad en nuestro conocimiento de Jesús.
  • Ser un varón perfecto, o maduro (o mujer madura).
  • Llegar a la medida de la estatura de la plenitud de Cristo.

¡Guau! ¡Esa es una meta muy difícil! ¿Crees que ya hemos llegado? ¿Es posible que no estemos allí porque estas oficinas no están funcionando conforme al plan de Dios? ¿O porque muchos no están funcionando en su vocación?

La condición actual de muchos creyentes

14 Para que ya no seamos niños fluctuantes, llevados por doquiera de todo viento de doctrina, por estratagema de hombres que para engañar emplean con astucia las artimañas del error. (RVR)

Lamentablemente, este verso describe a muchos cristianos:

  • Niños fluctuantes, que cambian fácilmente de parecer.
  • Gente llevada por doquiera con cada viento de doctrina.
    • Son arrastrados por el viento de cualquier nueva enseñanza.
    • Un día vean a algún profeta en la televisión y sigan su palabra; al otro día sea un apóstol con otra palabra.
    • Resulta en mucha confusión. Es por eso que Dios nos coloca en una iglesia, con un pastor en quien confiamos para enseñarnos la verdad. No quiero decir que es malo ver a otros en la televisión o en Internet, pero hay que tener mucho cuidado.
  • Son llevados por estratagema de hombres; por las astucias y los artificios de quienes emplean artimañas engañosas.
    • ¿Sabes que hay muchos en la iglesia con su propia agenda? Quieren establecer su propio reino. Piden mucho por dinero. Engañan a la gente.
    • Emplean con astucia las artimañas del error.

¿Cómo sabemos si la iglesia está funcionando bien?

  • Habrá estabilidad.
  • En vez de niños fluctuantes habrá gente firme en su fe.
  • Habrá un conocimiento sólido de la Biblia y sus enseñanzas.

La voluntad de Dios para tu iglesia

15 Sino que siguiendo la verdad en amor, crezcamos en todo en aquel que es la cabeza, esto es, Cristo, 16 de quien todo el cuerpo, bien concertado y unido entre sí por todas las coyunturas que se ayudan mutuamente, según la actividad propia de cada miembro, recibe su crecimiento para ir edificándose en amor. (RVR)

  • Seguir y profesar la verdad en el amor. Para ser un varón perfecto necesitamos ambos: la verdad y el amor. El amor sin la verdad es débil; la verdad sin amor es dura. La combinación es poderosa.
  • Crecer en todo en Cristo. La NTV lo dice muy bien: El hace que todo el cuerpo encaje perfectamente. Y cada parte, al cumplir con su función específica, ayuda a que las demás se desarrollen, y entonces todo el cuerpo crece y está sano y lleno de amor.
  • El cuerpo de Jesús funciona bien, con Cristo como cabeza, el cuerpo bien concertado y unido, y todas las coyunturas ayudándose mutuamente. Cada miembro tiene su propia actividad, don y vocación. Así siempre va edificándose en amor.

¿Eres parte de un cuerpo de Jesús? ¿Es saludable? ¿Está funcionando conforme a este plan de Dios? ¿Estás ministrando en tu vocación? ¿Cuál ajuste sea necesario?

La iglesia es el fundamento esencial para llegar a la madurez. Si tu experiencia en la iglesia es deficiente, será casi imposible seguir a los próximos pasos para ser un varón perfecto. He observado a muchos cristianos laborando arduamente para obtener esas cosas. Andan muy frustrados porque nunca han sentado el fundamento de este primer paso. En los cuarenta y cinco años que he sido creyente, he tenido conocimiento de muchas iglesias.  Muy pocas funcionan conforme a este plan tan sencillo, pero tan difícil también.  Tal vez Satanás haya hecho todo lo posible para destruir el cuerpo de Jesús porque tiene mucho temor de su potencia.