2  Juan

Ya que hemos estudiado la primera carta de Juan, estoy interesado en las otras dos cartas del apóstol. Debo confesar que nunca las he leído, y nunca las he oído predicar. Son muy cortas. ¿Hay algún mensaje importante para nosotros hoy?

Claro que sí. Creemos que Dios tiene un propósito en cada palabra de la Biblia. Hay algunos libros que son más “populares”, pero hay tesoros escondidos en cada libro. Una de las maravillas de las Escrituras es cómo Dios siempre tiene algo fresco para nosotros. Por mi parte, llevo 48 años estudiando la Biblia, y todavía encuentro cosas nuevas. Puede que no haya nueva revelación en estas cartas, pero nos dan un vistazo del corazón de este gran apóstol y de la iglesia de ese tiempo.

¿Qué sabemos de ellas?

Algunos creen que sirvieron como cartas de presentación de 1 Juan. Ambas tocan el tema de los evangelistas itinerantes, que llevaron el evangelio a nuevos pueblos. Por lo general, eran hospedados en hogares y bendecidos con ofrendas para su viaje cuando partían hacia el próximo pueblo. Los evangelistas de la herejía gnóstica, que ya estaba creciendo, siguieron este mismo patrón. En 2 Juan (el segundo libro más corto de la Biblia), Juan los insta a discernir a quién hospedan para que no apoyen inadvertidamente la propagación de herejías. La verdad y el amor son temas importantes, al igual que 1 Juan. En 3 Juan (el libro más corto de la Biblia), el apóstol responde al rechazo de sus mensajeros por parte de un líder (Diótrefes) en una de las iglesias de Asia, y elogia a Gayo por su apoyo.

Las palabras de estas dos cartas son muy similares a 1 Juan y al Evangelio de Juan, lo que confirma que Juan es el autor.

2 Juan

El anciano, a la iglesia elegida y a sus miembros, a quienes amo en la verdad —y no solo yo, sino todos los que han conocido la verdad—, a causa de esa verdad que permanece en nosotros y que estará con nosotros para siempre:

En la salutación de esta carta ya veo que es más personal, y la salutación es más extensa. ¿Sabemos quién fue el que recibió la carta?

En realidad, en griego dice “la señora elegida y sus hijos.” Puede ser una persona o, con la libertad que se toman los traductores de la NVI, una iglesia y sus miembros. No sabemos exactamente quién, o cuál iglesia, pero claramente son creyentes que Juan conocía. Probablemente fue una iglesia en Asia que el supervisó.

¡Ya veo la palabra “verdad” tres veces en estos dos versículos!

Sí, hay algo en el tono de Juan que nos da mucha confianza en lo que va a decir. Es anciano, lo que trae más autoridad. Forman parte de una comunidad grande que comparte el conocimiento de la verdad, la cual los une (y no algún sentimiento). A diferencia de algunos falsos maestros, Juan los ama en la verdad, y esa verdad no cambia; permanece en ellos y estará con ellos para siempre. El evangelio no es ilusiones. Es la verdad eterna, y es el fundamento esencial de nuestra fe, nuestra unidad y nuestro amor.

¿Estás fundado sobre esa verdad? ¿Tu iglesia? ¿O eres como un niño, echado de una doctrina a otra?

La gracia, la misericordia y la paz de Dios el Padre y de Jesucristo, el Hijo del Padre, estarán con nosotros en verdad y en amor.

¡Allí está de nuevo! ¡Verdad y amor!

¡Qué fuerte combinación! Hay algunos que hablan del amor, pero es sin discernimiento. De una manera, como Dios ama al mundo, amamos a todos. Pero también tenemos que combinar ese amor con la verdad, para no permitir que alguien peligroso o herético entre en nuestra vida. En cambio, hay algunos tan celosos de la verdad que les falta amor. ¡Qué rico experimentar la gracia, la misericordia y la paz de Dios en verdad y en amor!

Parece que Juan dice que tanto el Padre como el Hijo nos ofrecen esa gracia, misericordia y paz.

Sí, es una afirmación poderosa de la divinidad de Cristo y su capacidad de extender estos elementos que solo Dios nos da.

¿Estás experimentando la gracia, la misericordia y la paz de Dios en tu vida ahora? Si no, ¿tienes alguna idea de por qué? Están disponibles para ti ahora.

Me alegré muchísimo al encontrarme con algunos de ustedes que están practicando la verdad, según el mandamiento que nos dio el Padre. 

Me gusta este énfasis en la verdad, porque parece que hoy todo es relativo. Es común decir algo como: “Puede que sea la verdad para ti, pero no lo es para mí.” Supuestamente deberíamos aceptar a todos, porque no existe una verdad absoluta.

Sí, la verdad es muy importante. El criterio para nuestro compañerismo es practicar la verdad. No solo decir que la creemos, sino practicarla. Otras versiones dicen “andando en la verdad” (LBLA) y “viven de acuerdo con la verdad” (NTV). Existe un vínculo especial entre aquellas personas que andan en la verdad.

Y ahora, hermanos, les ruego que nos amemos los unos a los otros. Y no es que les esté escribiendo un mandamiento nuevo, sino el que hemos tenido desde el principio. En esto consiste el amor: en que pongamos en práctica sus mandamientos. Y este es el mandamiento: que vivan en este amor, tal como ustedes lo han escuchado desde el principio.

Eso suena como si viniera directamente de su primera carta.

Es un tema central en el corazón de este apóstol “quien Jesús amaba.” Manifestamos nuestro amor a Cristo en nuestra obediencia a sus mandamientos. Los dos mandamientos más importantes (Mateo 22:36-40), y el nuevo mandamiento de Jesús (Juan 13:34), tienen que ver con vivir en amor.

Es que han salido por el mundo muchos engañadores que no reconocen que Jesucristo ha venido en cuerpo humano. El que así actúa es el engañador y el anticristo.

Este también es un tema de 1 Juan.

Estos engañadores no andan en la verdad; enseñan una mentira. El amor que Juan promueve aquí no significa que pasemos por alto esas mentiras y herejías. De hecho, el verdadero amor implica confrontarlos con la verdad para posiblemente salvar sus almas y guardar a otros de su error.

Cuídense de no echar a perder el fruto de nuestro trabajo; procuren más bien recibir la recompensa completa. 

¿Cómo pueden perder el fruto de su trabajo?

Parece que Juan era un padre espiritual de esta iglesia. Juan les había predicado y establecido una iglesia allí. Tuvieron una buena cosecha. Pero luego llegaron las falsas doctrinas que fácilmente corrompen y apartan a los hermanos de la iglesia y de la sana doctrina

Leí este versículo en la Reina Valera y dice “de vuestro trabajo.” ¿Cuál es?

Parece que la mejor traducción, la que hacen las traducciones más modernas, es “nuestro trabajo”, el trabajo de Juan y sus compañeros en el ministerio.

¿Cuál sería esta recompensa? Parece que no es seguro que la reciban.

Aunque no servimos a Cristo solo para recibir una recompensa (debe ser por amor y gratitud, y un deseo de glorificar a Dios), la Biblia promete una recompensa para todos los que son fieles a Cristo. Puede incluir responsabilidades y posición en su reino, una corona, vida eterna, felicidad y paz.

Todo el que se descarría y no permanece en la enseñanza de Cristo no tiene a Dios; el que permanece en la enseñanza sí tiene al Padre y al Hijo. 

La enseñanza de Jesús contenida en el Nuevo Testamento es nuestra guía. Tenemos que permanecer en ella y tener mucho cuidado con alguien que trae una doctrina nueva o diferente. Los gnósticos enseñaban que el Hijo de Dios no se hizo carne, sino que temporalmente vino sobre el hombre Jesús entre su bautismo y crucifixión. Creían que Cristo no pudo haber sido Dios y hombre al mismo tiempo. Decían que el espíritu era bueno y la materia mala, y creían que habían avanzado más allá de las enseñanzas de los apóstoles.

10 Si alguien los visita y no lleva esta enseñanza, no lo reciban en casa ni le den la bienvenida, 11 pues quien le da la bienvenida se hace cómplice de sus malas obras.

Esto me parece lo más importante de esta carta.

Estoy de acuerdo. Hay algo parecido en las cartas de Pablo, pero Juan lo deja muy claro aquí: Cualquiera que apoye a ese tipo de gente se hace cómplice de sus malas acciones. (NTV) El griego dice literalmente (como lo traduce la LBLA): ni lo saludéis,  pues el que lo saluda participa en sus malas obras. Eso significa que no tenemos nada que hacer con ellos. Claro que mucha gente dirá que somos rígidos y faltamos el amor, pero no podemos tolerar doctrinas de demonios u otras enseñanzas falsas. Creo que necesitamos mucho discernimiento hoy para poner en práctica este mandamiento.

Sí, pienso que tengo que reflexionar y orar sobre cómo me relaciono con algunos amigos de iglesias con enseñanzas que van en contra de la Biblia.

12 Aunque tengo muchas cosas que decirles, no he querido hacerlo por escrito, pues espero visitarlos y hablar personalmente con ustedes para que nuestra alegría sea completa.

Es comprensible, porque ya ha presentado algo bastante fuerte, que puede ser malentendido.

Es cierto, y nos cuesta un poco conocer toda la dinámica de esta iglesia. Creo que ahora, más que nunca, con tantos mensajes por WhatsApp y otros medios, nos damos cuenta de lo fácil que es malentender lo que alguien escribe en internet.

13 Los miembros de la comunidad elegida, hermana tuya, te mandan saludos.

Juan confía en que no han caído en falsa doctrina, porque les envía saludos. Acaba de decir que no debes saludar a alguien que tiene una enseñanza herética. Literalmente, como lo traduce la LBLA, seria: Te saludan los hijos de tu hermana escogida. Eso parece confirmar lo que dijimos al principio: La señora es la iglesia.